Tiempo después abandonó la coalición partidista que lo hizo ganar, donde su labor tuvo pobres resultados y su regreso al PRI, muchos lo lamentaron, generando críticas de todo tipo.
El ex rolandista y ex morenista no es visto como una persona que tenga muchas ganas de servir, como bien dicen varios cibernautas, es para continuar teniendo poder y de esta forma impunidad.
Si el partido en formación pretende empoderarse entre los electores yucatecos, con este tipo de elementos no es la mejor forma de generar simpatías.
Queda claro que el que traiciona una vez, se vuelve un hábito el llevarlo a cabo cada determinado tiempo.
La gente que veletea en forma cotidiana, lo llevan en su ADN, por lo que los electores deben tener muchas reservas al escuchar los mismos posicionamientos de que van a cambiar, de que todo será distinto, son los mismos rollos, pero con otro logotipo.
Es por ello por lo que varios de los asistentes a la asamblea distrital, varias personas no dudaron en expresar su repudio a los obsequios proselitistas que recibieron y con ello queda claro que esta agrupación política en formación empieza con el PIE IZQUIERDO.
Lamentablemente este fenómeno se ve en todo el país, donde la política sigue en muchos estados siendo puerca, traicionera y sucia y Yucatán no es la excepción.
Por EL PRINCIPAL